La nueva generación del vehículo eléctrico japonés, lanzada en 2025, destaca por su estilizado exterior y capacidad de recorrido que supera los 600 km. “Es uno de los primeros coches que se tomó lo de ser eléctrico en serio”, según se destaca en su presentación oficial.
Autonomía mejorada y cargas exprés
La versión de gama alta con batería de 75 kWh ofrece más de 600 kilómetros de alcance. Para recargas rápidas, “permite ganar 417 kilómetros en 30 minutos” gracias a su capacidad de carga de 150 kW. Los responsables del diseño recalcaron su coeficiente aerodinámico de 0,25, clave para optimizar el consumo.
Innovaciones tecnológicas y conectividad
El modelo incorpora el asistente de Google con integración de Maps para planificar rutas y preparar la batería antes de llegar a estaciones de carga. Incluye sistema V2L para alimentar dispositivos externos y preparación para tecnología V2G que permitirá devolver energía a la red eléctrica en próximas actualizaciones.
Diseño global y espacio interior
Con líneas suaves creadas en el centro de diseño de Japón, el vehículo crece en dimensiones: 2.6 metros de distancia entre ejes y 10 cm adicionales de anchura. El maletero ofrece 437 litros de capacidad y el habitáculo mejora el espacio para piernas y cabeza de los pasajeros traseros.
Plataforma avanzada y asistentes de conducción
Bajo su estructura se encuentra la plataforma CMF-EV compartida con el Nissan Ariya. Cuenta con suspensión delantera McPherson y trasera multibrazo. Entre sus asistentes tecnológicos se encuentra el Pro Pilot Assist y el e-pedal Step con frenado regenerativo. La interfaz principal utiliza una pantalla de 14.3 pulgadas con controles físicos complementarios.