El comportamiento del tipo de cambio entre el dólar estadounidense y el peso mexicano ha mostrado una tendencia decreciente en las últimas semanas, alcanzando cotizaciones por debajo de los 19 pesos. Esta dinámica se intensificó particularmente el 6 de junio, cuando se publicó una columna señalando este fenómeno y anticipando una posible reducción adicional.
Factores que impulsan la depreciación del dólar
El dato de inflación en Estados Unidos se convirtió en un factor clave para este movimiento cambiario. El índice de precios al consumidor reportó un aumento anual del 2.4 por ciento en mayo, apenas un 0.1 por ciento superior al registrado en abril. Este comportamiento moderado ha sido interpretado como una señal de control inflacionario, a pesar de los aranceles impuestos por la administración estadounidense.
“Es evidente que las empresas están haciendo un esfuerzo notable para absorber estos costos adicionales, evitando trasladarlos a los consumidores finales”, se destacó en el análisis original. Esta observación sugiere que el impacto inflacionario de las políticas comerciales no se ha manifestado plenamente en los precios al consumidor.
Perspectivas de política monetaria y fiscal en EU
La estabilidad en los indicadores inflacionarios ha incrementado la posibilidad de que la Reserva Federal mantenga sin cambios sus tasas de interés en las próximas reuniones. Donald Trump expresó públicamente su interés en una reducción de tasas, calificando el comportamiento inflacionario como “excelente”.
Aunque se considera probable que haya ajustes en las tasas a partir de septiembre, estos se atribuirían principalmente a una baja sostenida en la inflación, no a presiones políticas. Por otro lado, el paquete fiscal promovido por Trump sigue su curso legislativo, siendo procesado mediante el mecanismo de reconciliación presupuestaria que permite su aprobación con mayoría simple.
Impacto en comercio bilateral y competitividad
El fortalecimiento del peso mexicano tiene implicaciones mixtas para la economía del país. Por un lado, beneficia a los importadores al reducir el costo de los bienes y servicios extranjeros. Sin embargo, perjudica a los sectores exportadores, particularmente al automotriz, cuyos envíos a Estados Unidos disminuyeron 2.7 por ciento en abril. La participación de México en las importaciones totales de EU bajó del 15.9 al 15.1 por ciento anual.
El posible acuerdo para exentar al acero y aluminio mexicanos de aranceles estadounidenses ha influido positivamente en la cotización del peso, aunque el convenio aún no ha sido oficializado.
Escenarios futuros del tipo de cambio
Para los próximos meses, se espera que la evolución del dólar esté condicionada por dos elementos principales: la definición sobre aranceles programada para el 9 de julio y el resultado del paquete fiscal en debate. Si bien una aprobación podría generar un fortalecimiento temporal del dólar, el aumento del déficit fiscal derivado de la reforma sugiere una tendencia a la debilidad posterior.
En este contexto, se plantea como escenario probable alcanzar cotizaciones del dólar por debajo de los 18.50 pesos en los próximos meses.