Debilitamiento en la entrada de capital afecta el impulso alcista
El mercado de bitcoin enfrenta un desafío que pone en riesgo su reciente tendencia alcista. CryptoQuant, proveedor de datos en la cadena, ha detectado una disminución en la entrada de nuevo capital, clave para mantener el impulso de los precios, lo que podría llevar al activo a niveles de soporte críticos.
Según el informe, el momentum de la demanda ha caído a 2 millones de BTC, el nivel más bajo registrado. Esta métrica refleja una reducción significativa en la llegada de nuevos compradores. En los últimos 30 días, el crecimiento de la demanda al contado fue de 118.000 BTC, muy por debajo del máximo de 228.000 BTC alcanzado el 27 de mayo de 2025.
Actividad de grandes jugadores disminuye
Las ballenas y los fondos cotizados en bolsa (ETF) han reducido drásticamente sus adquisiciones. Los balances de las ballenas han crecido solo un 1,7 % intermensual, comparado con el 3,9 % registrado a finales de mayo. Por otro lado, las compras diarias de los ETF en Estados Unidos han caído de 9.700 BTC el 23 de abril a 3.300 BTC en la actualidad.
La disminución en la participación de estos grandes actores refuerza la percepción de un mercado con demanda debilitada, lo que aumenta la presión sobre el precio del activo digital más importante del mundo.
Menor participación de nuevos inversores
El número de nuevos inversores también ha disminuido. Los tenedores a corto plazo (STH) poseen ahora 4,5 millones de BTC, una caída de 0,8 millones respecto a los 5,3 millones del 27 de mayo. Esta reducción en la oferta en manos de STH indica una menor entrada de capital fresco, un factor crucial para las subidas sostenidas de precios.
En un entorno alcista típico impulsado por el retail, se espera un aumento en esta métrica, pero la dinámica actual sugiere que el soporte del precio depende más de los tenedores a largo plazo o de la demanda institucional que de nuevos participantes.
Perspectivas técnicas y factores macroeconómicos
Analistas de CryptoQuant advierten que, si la demanda sigue debilitándose, bitcoin podría retroceder hasta los 92.000 dólares, nivel que corresponde al precio realizado en la cadena de los operadores, un punto de apoyo habitual en mercados alcistas. Si este nivel no resiste, el siguiente soporte se ubicaría en torno a los 81.000 dólares.
A pesar de las señales de alerta, no todo es negativo. El precio de bitcoin se encuentra en una fase de consolidación entre los 100.000 y 110.000 dólares. Sin embargo, el contexto macroeconómico no favorece al activo. Las tensiones en Medio Oriente, derivadas del conflicto entre Israel e Irán, generan incertidumbre en los mercados globales, afectando activos volátiles como bitcoin.
No obstante, existen catalizadores potenciales que podrían revertir esta tendencia. Christopher Waller, miembro de la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos, señaló que el organismo podría recortar las tasas de interés en julio, dado que la inflación ha dejado de ser una amenaza significativa. Unas tasas más bajas reducirían el costo de endeudamiento, incentivando la inversión en activos como bitcoin.
Crecimiento institucional y proyecciones de analistas
Otro factor positivo es la adopción institucional creciente. Cada vez más empresas consideran a bitcoin como un activo de reserva, siguiendo el modelo de Michael Saylor, presidente de Strategy, la compañía pública con mayores tenencias de BTC.
El analista Willy Woo destaca que los flujos institucionales hacia bitcoin son “extremadamente fluidos”, comparándolos con una estrategia de promedio de costo en dólares. Woo proyecta que, si bitcoin vuelve a superar sus máximos históricos, podría alcanzar los 118.000 dólares rápidamente.
“Es probable que haya un impulso más a la baja antes de que logremos una ruptura real”
Esta afirmación proviene de Swissblock Technologies, empresa especializada en análisis de mercados de activos digitales. La firma también muestra el “spot volume delta”, que mide la diferencia entre el volumen de compra y venta en el mercado al contado. Las barras negativas en junio confirman una demanda neta negativa, donde las ventas superan las compras.